Posiblemente podríamos enumerar algunos títulos más, pero no nos llevarían a ningún lado.
La magia está presente en nuestro mundo desde sus comienzos, la Astrología está acompañándonos desde que la Cultura con mayúsculas, hizo su aparición, los Oráculos acompañaron a todos los grandes Reyes y
Emperadores de la antigüedad a ganar sus batallas y campañas militares.
Y desde que las ciudades son el centro de la vida social podemos incluir también a echadores de cartas, de tarot, lecturas de manos, bolas de cristal………….. toda una parafernalia que rodea a un núcleo de gente que se encargan de “”asesorar”” a toda una serie de gente que necesita “oir” ciertas cosas en ciertos momentos determinados……..
La Revolución Tecnológica ha sido la Impulsora del progreso en nuestro mundo, en buena parte debida a un gran hombre, bastante olvidado, como Nikola Tesla, pero dejemos eso por ahora, que no es el centro de nuestra reflexión.
Y ante este progreso tan acelerado, no todo el mundo es capaz de asimilar todos los conocimientos y adelantos que se van produciendo día a día, e incluso hora a hora.
Del mismo modo, no todo el mundo tiene acceso a medios de comunicación especializados que les expliquen cada uno de los adelantos existentes, o al menos que se les cuente de modo fácil y sencillo todos los adelantos que se están utilizando en estos momentos, para irse acostumbrando y que no les suene a chino cuando vean alguna noticia relacionada con estos eventos. Y es ahí donde aparece la labor, la importante labor de los Divulgadores Científicos.
Explicar, comentar y traducir al lenguaje coloquial de todas las personas, todos esos progresos para que sean capaces de comprenderlos, aumentar sus conocimientos, y poder formarse una opinión.
Importante labor, imprescindible diría yo en nuestros días, donde el exceso de información nos inunda y nos sobrepasa.
Pero cuando la información objetiva e imparcial se impone, aparecen los Cruzados defensores de la Ciencia a ultranza, a modo de una Santa Inquisición, que lleva a cabo una Yihad, o Guerra Santa contra todo aquello que signifique misterio, paranormal, brujería, medicinas alternativas, interrogantes y preguntas que se mantienen en el tiempo…… donde todo eso o es mentira, o es fraude, o es montaje, y quienes a ello se dedican son vividores, impostores, y grupos de farándula de feria…
Toman partido en pro de una idea y de una concepción de la Ciencia, toman partido en lo que se debe y se tienen que considerar científico o no, toman partido en quien habla desde los postulados de la Ciencia y quien no.
Y así empezamos a colocarnos en un extremo o en otro de la balanza, y no podemos intentar desequilibrarla, ha de ser el propio interesado quien se incline hacia un lado u otro tras ver la información de que se dispone, información que ha de ser aséptica, imparcial y objetiva. Porque hay algo que suele olvidarse, o no, con frecuencia, y es que la gente tiene capacidad de deducción y de raciocinio, aunque a algunos les cuesta aceptarlo.
Ese paternalismo viciado que lleva a arropar a la gente con las propias ideas y conclusiones para evitar que uno mismo lleve a cabo su propio proceso deductivo, está haciendo estragos en una sociedad que empieza a tener falta de referentes.
Y es esa falta de referentes la causante de que la gente se incline hacia opciones pintorescas, siniestras, exultantes, visionarias, religiosas y hasta espaciales.
Pero tan incongruente es una postura como la otra. Unos porque no saben lo que quieren, lo que van a hacer, lo que quieren ser, o que labor van a desempeñar en esta vida…….
Y los otros porque se han erigido en el faro de salvación de la Ciencia, cayendo en el extremismo más rancio que nos recuerda otras épocas pasadas, teniendo como único credo el desacreditar, desprestigiar, perseguir, difamar, y hasta insultar a todos aquellos que hablen, comenten, escriban o practiquen ritos o rituales poco claros o definidos.
El resto estamos en el medio viendo como transcurren los días, sin que cambien las posturas o los pensamientos de unos o de otros.
Y aquellos que debieran de ser neutros, objetivos e imparciales en la transmisión de los conocimientos científicos, se tornan parciales, y seguidores de un mismo objetivo, además de intentar utilizar la ciencia como apoyo o explicación a sus actuaciones.
Que lejos de la realidad, y hasta de la verdad. Solamente aquellos que entienden un poco de que va el tema abren los ojos con sorpresa, y a veces escandalizados al ver los escritos y opiniones de ciertos…………. ¿divulgadores científicos?
Lo curioso también es el séquito de seguidores que les acompaña, entre los cuales se extiende la creencia de que el haber leído un libro o dos sobre un tema, ya les confiere autoridad sobre el mismo, llegan incluso a la discusión con expertos o especialistas en el tema, y no porque se vean autorizados, sino porque se lo creen, ya que todo es válido en la cruzada contra el no creyente o anticiencia.
Uno más de los despropósitos que podemos vivir hoy en día.
Hablan de todo tipo de temas, Ingeniería, Astronomía, Historia, Química, Medicina, etc, etc…… como si fuesen doctos en la materia, y al final se acaba viendo que se meten en camisas de once varas, donde la única salida posible es hacia delante.
Internet es una fuente de datos interminable, pero es un craso error el creer que todo se puede encontrar en la red. Mucha información no aparece ahí, sigue en los libros de texto, y de las investigaciones realizadas por los especialistas correspondientes, que se encuentran en Bibliotecas, en bases de documentación, que en la mayor parte de las ocasiones no están al alcance de todos.
Y mayor error, el que cometen estas personas, que después de mucho buscar por la Red, si no encuentran ningún dato sobre algo, sencillamente ese algo…… no existe.
¿Quien es esta gente para decir que es lo que se puede ver o no, lo que se puede ir a escuchar o no, lo que se puede debatir sobre un tema interesante sea cual sea éste o no, lo que se tiene que enseñar en las Universidades o no….? Nadie, no son nadie, ya no sólo para intentar impedir a toda costa que se lleve a cabo, sino por llevar a cabo todo tipo de protestas al respecto.
Claro, obviamente responderán que tienen todo el derecho a hacerlo, a lo cual es fácil de responder que también se tiene derecho a escucharlo, o verlo o debatirlo. Pero claro, al parecer el derecho de oposición de ellos prevalece sobre el de aquellos que quieren hacerlo, eso es Humildad y Democracia con mayúsculas para esta gente.
Y con estas premisas tenemos que convivir, no solamente con ellas sino con las consecuencias de estas.
Creo que ya estamos cansados de Totalitarismos, para que a estas alturas intenten imponernos otro.
Pues como decía al principio “”la magia está presente en nuestro mundo desde sus comienzos, la Astrología está acompañándonos desde que la Cultura con mayúsculas hizo su aparición…”””” y a partir de ahí llego la Medicina y la Ciencia.
Y eso, por más que fastidie y duela, no se puede borrar de nuestra Historia.
Octavio Dopico
4 comentarios:
La verdad es que este tipo de gente siempre me ha dado bastante pena, el bosque les impide ver los árboles...
Recordando la Teoría de las Supercuerdas estos "divulgaciencias" viven en una dimension de un solo plano y no son capaces de ver lo que ocurre en otras dimensiones que tambien existen aunque ellos no las vean.
un beso
marga
Me gusta como explicas las cosas
Lo de la ciencia que dices o de esos señores y señoras que dicen no a todo, a veces creo que a lo mejor les da miedo.
Porque si saben todo del mundo pues piensan que lo controlan y si existe la magia de lo invisible o inteligencias que no conocen, a lo mejor les da miedo no ser los dueños del mundo.
Pero el miedo lo seguiran teniendo si no cambian y miran mejor de entender en vez de decir no a todo.
un beso especial para ti.
voy a buscar la teoria de las supercuerdas porque no la entiendo mucho.
Curioso resulta difundir la anticiencia desde un espacio que existe gracias a la ciencia. La magia está desde el principio... es cierto, y nunca ha dado UN fruto, UN descubrimiento. Nunca NADA bueno ha salido de eso... ¿hace falta pensarlo?
Mirko, excelente apreciación que comparto.
Aprovecho para saludar a antiguos/as colegas como Octavio con quien poco o nada comparto sus creencias pero que tiene mucho valor como persona.
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